viernes, 27 de julio de 2012

Fábula teatral de Astrología y Signos del Zodiaco


ACTO I


ACTO II

                                 
Apuntes Mitológicos

La acción se desarrolla en lugares míticos de la Antigua Grecia
Recinto Sagrado de Olimpia, Templo de Posidón en el Cabo Sunión, Monte Olimpo, Acrópolis de Atenas, Oráculo de Deflos.

  Afrodita, pretende ser la portadora del primer Fuego Olímpico, pero antes se verá obligada a buscar la esencia de la perfección humana a través de  los Signos del Zodiaco, y  descifrar el enigma de un misterioso Decatlón...


PERSONAJES:

                   Afrodita   (Diosa del amor)

                   Eósforo   ( Mito masculino del Lucero del Alba)
                                                       Se transforma en: Posidón, Hades, Urano,       
                                                       Hermes, Crono, Zeus, Apolo, Ares.
                   Urania     (Musa de la Astrología)
                                                      Se transforma en Selene.
 
 

Publicada en Internet, el día 20 de agosto de 2004,  en el portal: regmurcia.com coincidiendo con los  Juegos Olímpicos de Atenas.  Leer texto en Biblioteca Digital Región Murcia
Reeditada en este blog para los Juego Olímpicos de Londres 27 julio 2012.
Obra  editada con fines educativos. Se autoriza su difusión y  representacion en centros culturales o de enseñanza (colegios e institutos) sin ánimo de lucro.

 Para  otras representaciones teatrales conectar con el autor o SGAE.


 © Cristián Mínguez  - SGAE nº 99225

cristian.minguez@yahoo.es

Fotos de los Signos del Zodiaco, realizadas por el autor en el Parque  de Vigeland en  Oslo (Agosto 2009)



Acto I Escena I

                                




 Afrodita, Eósforo
 
 Recinto Sagrado de Olimpia.

 Columnas de diversas alturas , una escalinata  y un pebetero; elementos que irán cambiando de posición y que simularán cada uno de los espacios posteriores de toda la obra. Una de las columnas siempre está rodeada por una guirnalda de rosas.

Afrodita baja con solemnidad. Lleva en su mano el fuego sagrado.


    Afrodita.- A todos los dioses invoca Afrodita para que este fuego sagrado prenda la llama que ha de iluminar el destino de los mortales.
Con esta fuente del primer elemento fundamental del Universo los atletas del futuro recordarán que aquí, en el Recinto Sagrado de Olimpia, en el plenilunio de verano, la diosa del amor emanó sus efluvios positivos para que  armonía  y  concordia  reinen por siempre en los Juegos Olímpicos venideros, a los que auguro gran prosperidad.(Alza la antorcha)
Fuego sagrado, comienza tu andadura (prende el pebetero).

(Hay un gran resplandor y de entre las llamas surge Eósforo)

Eósforo.- (Sonriente) Vas muy deprisa Afrodita; la historia no te reconocerá tu intención de ser pionera en los primeros Juegos Olímpicos. Ese honor corresponderá al rey Pélope.

Afrodita.- ¿Qué haces tú aquí, Eósforo?. Deberías tener en cuenta que mi presencia  ha de eclipsar la tuya.

Eósforo.- ¡Vamos Afrodita! No seas tan vanidosa; de sobra sabes que representamos el mismo mito. Tú el femenino y yo la versión masculina.


Afrodita.- (Altiva) ¡Qué ingenuo!. Aún no has asimilado que simplemente, te dejan ser una sombra de mi fulgor.

Eósforo.- ¿Serías capaz de decir eso cuando me ves resplandecer como Lucero del Alba?

Afrodita.- (Cambia de actitud) Tienes razón ¡qué visión tan bella!

Eósforo.-   Ya ves, representamos el mismo concepto, que no es otra cosa que ¡la belleza en si misma!

Afrodita.- (Levanta sus brazos en señal de invocación) ¡Oh sí!; ¡la belleza!.(Invoca) .Dioses del Olimpo, llenad de belleza este recinto sagrado; que las formas y  movimientos de los atletas  sean reflejo de la perfección y armonía que los seres humanos pueden llegar a alcanzar en su grado más elevado del  plano físico.

Eósforo.- (Que se ha sentado para contemplarla) Deberías tener en cuenta que la verdadera armonía no puede estar solamente en uno de los planos de la existencia humana, el físico. ¿Qué me dices de los otros dos: mental y espiritual?.

Afrodita.- Ese es el trabajo personal de cada individuo, alcanzar un equilibrio entre todos los planos, lo sé; pero la base, no dudarás que, está en el cuerpo; sin él, no hay posibilidad de avanzar. Por ese motivo será tan importante este acontecimiento histórico ¡Los juegos Olímpicos!, a través de ellos se perfeccionarán las esculturas humanas.

Eósforo.- ¿Es eso lo que se les va a exigir a los atletas para   la Olimpiada?

Afrodita.- De momento, tienen que reunir las siguientes condiciones: Ser griego; libre, no esclavo; hijo legítimo; no estar deshonrado y haber entrenado diez meses, el  último en Elios.

Eósforo.- ¿Consideras que es suficiente?

Afrodita.- Son todos los dioses, y no yo, quienes marcan esas condiciones;  si no lo son, la historia se encargará de establecer las que en cada época sean convenientes.

Eósforo- Deberíamos dejar constancia de la necesidad de cultivar los otros planos.

Afrodita.- Nosotros, dioses y diosas, les ayudaremos para que lo hagan...

Eósforo.- ¿Cómo?...No  olvides que existe el libre albedrío.

Afrodita.- Con una buena formación, ese libre albedrío tomará rumbo hacia la armonía cósmica.

Eósforo.- (La toma de las manos y da unas vueltas con ella) Me encanta oírte hablar así. ¡Qué óptimas son tus palabras, bella Afrodita!.

Afrodita.- (Riendo) Mi meta es, ante todo:  ¡La felicidad!

Eósforo.- Y... ¡El amor!

Afrodita.- Sí ¡ El amor!

Eósforo.-  La energía más sublime del Universo...

Afrodita.- ...¡Mi energía!...

Eósforo.- ...¡Nuestra energía!... Yo represento lo mismo que tú.

Afrodita.- Puede ser la energía de todos. La clave está, simplemente, en llegar a sentirla.

Eósforo.- ¡Amar y ser amado! ¿Hay algo mejor?

Afrodita.- Lo dudo, Eósforo; (piensa y reacciona) somos unos privilegiados. Imagínate, nos han creado para donar esa energía tan hermosa ¿no te parece maravilloso?

Eósforo.- Sí, Afrodita, es maravilloso... Tú eres maravillosa...  ¡Tan hermosa!

Afrodita.-(Vuelve a reír) ¡Amor!, ¡Belleza!, ¡Armonía!....¡Qué felicidad!...
Eósforo.- Y qué paz se respira en este Valle de Olimpia; la atmósfera mas tranquila y tibia del Peloponeso.

Afrodita.- ¡Sí! Aquí a los pies del Monte Cronion y a orillas del río Alfeo, todo invita a vivir pacíficamente. Será un bello lugar para que los pueblos se reconcilien en cada una de las olimpiadas.

Eósforo.- ¿Lograrás con tus invocaciones, que así sea?

Afrodita.- ¡Estoy segura!

Eósforo.- Unamos , entonces,  nuestras vibraciones más armónicas e invoquemos juntos ...

(Toma a Afrodita de la mano y se acercan hasta el fuego sagrado. Meditan unos momentos.)

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"Decatlón de Afrodita" de Cristián Mínguez


Obra  editada con fines educativos. Se autoriza su difusión y  representacion en centros culturales o de enseñanza (colegios e institutos) sin ánimo de lucro.

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 © Cristián Mínguez  - SGAE nº 99225

cristian.minguez@yahoo.es


Acto I Escena II

                                                                   
  Afrodita, Eósforo , Urania

(El fuego se aviva produciendo un resplandor dorado que ilumina el recinto. Entonces, en lo alto de la escalinata, aparece Urania, majestuosa con su corona de estrellas y un gran manto azul, también cuajado de estrellas).

Urania.- Hasta los cielos han llegado las invocaciones de Afrodita;  y yo, Urania, musa de la Astrología, debo servir de guía para que esas peticiones se puedan  materializar y sirvan de orientación en la vida de los futuros atletas.

Afrodita.- (Sorprendida) ¡Urania! ¿Cómo es posible que vengas precisamente tú, si jamás te he invocado en mis rituales mágicos?

Urania.- No olvides que soy reina de los astros y ellos dominan, con su influencia, cada instante de la programación universal, y tanto tú, como este evento, formáis parte de ella.

Eósforo.- ¡Sí!.  Los luceros siempre estamos ahí; yo doy constancia de ello ...

Urania.-  A ti Eósforo, te hago salir cada mañana, para que anuncies el nuevo día. Eres el lucero más bello ante los ojos de los humanos.

Afrodita.- (Altiva) ¡Somos!, querrás decir. Nuestra simbología es idéntica.

Urania.- Tenéis la misma simbología pero aún estáis en polos de dualidad diferentes.

Eósforo.- Lo diferente puede ser complementario e incluso enriquecedor.

Urania.- No para la mente de los mortales; ellos necesitan puntos de referencia que sean lo suficientemente claros para poder adaptarlos a sus existencias.

Afrodita.- (Mirando a Eósforo)Estoy tan acostumbrada a mi otra dualidad que ya  no sé si podría vivir sólo cómo Afrodita.

Eósforo.- Un momento, ¿Por qué supones que nuestras entidades se fundirán en tu mito?; también podría ser en el mío..

Afrodita.- Por favor, Eósforo. ¿Crees que hay algo que sustituya a   “la diosa del amor”...

Urania.- Yo seré quien decida, finalmente, vuestro destino. No seáis soberbios. Vuestros mitos o vuestro futuro no dependen de vosotros sino del devenir de los cielos.

Afroa.- Estoy convencida que con el paso de los años, los humanos se olvidaran de nuestros mitos e incluso ,de la influencia de los astros.

Eósforo.- Yo no lo creo. Mientras siga brillando como estrella de la mañana, fascinaré a todo aquel que me contemple.

Urania.- Así es, Eósforo y así será. Los seres humanos necesitan de la Mitología.

Eósforo.- La Mitología será fascinante.                                          

Urania.- En cuanto a la influencia de los astros, tú Afrodita, debes tener en cuenta que la Astrología forma parte de la historia misma de la humanidad, ha sido creada para que sirva de punto de referencia en función de las posiciones celestes.

Afrodita.- Su simbología resulta demasiado compleja para mí.

Eósforo.- Aunque no por ello deja de ser maravillosa.

Urania.- Es un lenguaje cósmico universal, está unida a la verdad sustancial, y todo lo que se encuentra dentro de esta línea de veracidad permanecerá inalterable e indestructible siglo tras siglo,  milenio tras milenio...,(alza la voz) ¡ por siempre jamás!...

Afrodita.- Eso representaría...

Eósforo.- ¡La eternidad!..

Urania.- ¡Sí, la eternidad!; y lo eterno debe ser perfecto para que no se rompa el orden del Universo. Si queréis entrar en un mito eterno, deberéis fundiros ambos en un solo ente, perfecto, armónico...bello.

Afrodita.- Estás nombrando nuestros dones

Urania.- Unos dones que todavía son efímeros.

Eósforo.- ¿Insinúas,  qué podemos perderlos?

Urania.- Así es; mas yo os ayudaré para que   no suceda.

Afrodita.- ¿De qué forma nos ayudarás?

Urania.- Os daré las claves a seguir, pero el trabajo será vuestro.

Eósforo.- (Algo sarcástico) Espero que no sean como los trabajos de Heracles...

Afrodita.- No sé ni cómo haces esas comparaciones, ¿qué tendrá que ver ese forzudo  con nosotros que representamos el refinamiento y la armonía?.

Urania.-  A veces los trabajos físicos son más fáciles de realizar que los mentales o incluso que los espirituales.

Eósforo.- Precisamente era de lo que hablábamos Afrodita y yo .

Urania.- Sí, lo sé. Ése es un punto a vuestro favor; habéis comprendido el principio de los tres planos básicos de la existencia : el físico,el  mental y el espiritual. Ahora deberéis unirlos a la simbología de vuestro mito.

Afrodita.- (Se sienta con interés de escucharla) Háblanos del plano físico, para mí es el más bello.

Urania.- Está relacionado con el cuerpo humano, una máquina perfectamente programada para desarrollar vuestras acciones. Todas las técnicas que ayuden a una mejora de ese estado físico serán muy benéficas.El deporte, junto con su manifestación apoteósica de los Juegos Olímpicos, ayudará a que así sea.

Eósforo.- (Simulando una carrera) ¡Hay que mantenerse en forma!...y estamos en el lugar más indicado para ello, nada más y nada menos que junto al primer  estadio olímpico.

Afrodita.-  (Llamándole la atención) Eósforo, deja que Urania siga hablando.

Urania.- Ya os he dicho que no todo es el físico; puedes estar   preparado, Eósforo, serás todo un atleta, pero si no potencias también el plano mental, no serás un espíritu elevado.

Eósforo.- ¡Vaya!, qué pena...

Afrodita.- (Vuelve a llamarle la atención para que se calle) ¡Eósforo!...

Urania.- El plano mental se relaciona con el cultivo y dominio de la mente. Por eso no es aconsejable tomar productos en exceso que puedan dificultar el desarrollo. Este punto será también esencial para los atletas más pequeños y así deberéis transmitirlo generación tras generación.

Eósforo.- ¡Mente sana en cuerpo sano!...

Afrodita.-  Difícil de lograr, dada la naturaleza de los humanos.

Urania.- Todavía queda el plano espiritual,el más complicado. Se necesita tiempo para alcanzar un buen nivel. Está relacionado con el mundo de los sentimientos, las emociones y por supuesto con la ética y la religión. .

Eósforo.-  ¿Y para quienes no aceptan ninguna creencia o religión?...


 Urania.- El plano espiritual también puede potenciarse por medio de la creatividad artística.

Afrodita.- En cuanto a la parte artística se refiere,  mis efluvios  servirán de ayuda.

sforo.- (A Afrodita) Desde luego que podemos ayudar , tú y yo somos la belleza y el arte  más sublimes.

Urania.-Todo eso representáis, pero ¿Estáis seguros que lo sentís dentro de vosotros mismos?

Afrodita.- (Duda) No estoy muy convencida de ello...resulta difícil poderlo afirmar.

Urania.- ¿Y tú, Eósforo,  qué me contestas?

Eósforo.- (Duda primero y luego reacciona) Yo...¡Creo que sí!

Afrodita.- ¡Eósforo! No seas tan vanidoso.

Eósforo.- He sido creado para ser físicamente un cuerpo celeste bello ; mis pensamientos son  positivos, y bajo mi inspiración se crean las más bellas obras de arte. ¿No significa eso la armonía de los tres planos?...

Urania.- Tienes razón, Eósforo. ¡Has logrado un equilibrio!.

Eósforo.- Entonces, ¿Alcanzaré la eternidad?

Afrodita.- ¡No!, eso es imposible; ¡Afrodita! es quien está llamada a permanecer en la memoria de la humanidad. Tú debes ser únicamente el espejo donde se admira mi belleza. (Suplicante ) ¿No es verdad Urania?.

Urania.- Así está escrito desde el Alfa; pero tan sólo tú, Afrodita; puedes hacer que se mantenga hasta el Omega...

Afrodita.- ¿Cómo dices?...que yo (se tapa la cara con sus manos  y después continúa)...no termino de entender. Algo está sucediendo que altera mi bella armonía (da vueltas, inquieta).

Eósforo.-(Trata de calmarla) Tranquila, Afrodita, quebrarás también mi paz energética, no olvides que somos espejo uno del otro.

Urania.- ( A Afrodita) Si  tu equilibrio se ha visto alterado, ésa es exactamente  la señal que necesitas para saber que aún no has alcanzado la perfección que cómo diosa del amor y la belleza deberías  haber logrado.

Afrodita.- ¿Qué puedo hacer, entonces?. (Triste)Yo que venía a invocar los mejores augurios para los Juegos Olímpicos. ¿Cómo van a confiar en mí ahora los atletas?.

Urania.- Antes, tendrás que hacer tu propia olimpiada.

Eósforo.- ¿Su propia olimpiada? ¿Qué quieres decir ?

Urania.- Lo primero que haremos será detener el espacio, y el tiempo, que  será  anacrónico; no habrá pasado, presente ni futuro, hasta saber si Afrodita alcanza el estado más sublime de su perfección.

Afrodita.- ¿Y, si no lo consigo?...

Urania.- Tu reinado mitológico habrá acabado. Sólo brillaría en adelante, Eósforo,  que lo haría unas veces como lucero del alba, al amanecer ; y otras, como estrella vespertina después del crepúsculo.,

Eósforo.- (Triste) No, sin Afrodita  junto a mí,  no podría brillar; mi fulgor se apagaría, ella es parte esencial de mi naturaleza y de mi destino..

Urania.- Tus palabras son sinceras (Da unos pasos y medita) ...
Dejaré que la ayudes para que  pueda conseguirlo.

Afrodita.- ¿Cómo va a ayudarme?... ¿Qué es lo que yo tendría que hacer?.

Urania.- Tendrás que buscar  la esencia mágica de la perfección humana.

Eósforo.-Muy difícil se lo estás poniendo.

Urania.- El camino a la perfección es arduo, pero no imposible, menos aún para una diosa. Esa es su ventaja.

Afrodita.- No te preocupes, Eósforo. (Con dignidad) Afrodita, también puede ser fuerte, tengo la fortaleza del amor.

Urania.- Escucha bien, Afrodita; esta será tu misión (Hace movimientos mágicos entre efectos luminosos) . Deberás resolver este enigma: (Medita la frase) “Donde son diez, es el lugar de doce”

Eósoforo.- ¿”Dónde son diez, es el lugar de doce”?

Afrodita.- (Pensando en lo que ha oído) “Donde son diez , es el lugar de doce”...(Reacciona convencida) Ya está... ¡ un decatlón!

Eósforo.- Pero Afrodita, decatlón significa: diez, sólo diez, y no doce.

Afrodita.-   ¿No es un decatlón, Urania?, cómo la prueba olímpica que harán algunos atletas.

Urania.- No te impacientes. Primero debes oírme y luego intentar comprender;  (enérgica)  ¡Escuchad con atención!.  (Muy solemne) Existe un mecanismo celestial que se pierde en la noche de los tiempos y que ha formado el cinturón estelar más importante de todos mis dominios: son las doce constelaciones del Zodiaco.

Eósforo.- (Nostálgico) Las conozco bien, por cada una de ellas ando mi camino...                        
                                                                                 
Urania.- Bajo la influencia de estos doce grupos de estrellas se han creado las mismas simbologías que se corresponden con los llamados signos zodiacales, cuyos nombres son: Aries, Tauro, Géminis, Cáncer, Leo, Virgo, Libra, Escorpión, Sagitario, Capricornio, Acuario, Piscis.

Afrodita.- (Algo impaciente) Sí, eso yo también lo sé.

Urania.- En el conjunto de su simbología están escondidas las claves  para potenciar los planos básicos de la existencia humana. Tú misión, Afrodita,  será: encontrar la cualidad más perfecta de cada uno de los doce signos del Zodiaco.

Afrodita.- (Alarmada) ¡Eso es complicadísimo! no lo podré lograr...

Eósforo.- No te preocupes, Afrodita ; yo te ayudaré (vuelve a dudar), pero ¿cómo’.

Urania.- A ti, Eósforo, te concedo el poder de transformarte en cada uno de los mitos que rigen a los distintos signos del Zodiaco. De ti dependerá,  que Afrodita adquiera los conocimientos necesarios.


Eósforo.- ¿Como podré hacer tal cosa?…

Urania.- En un simple acto mediúmnico, te desdoblarás al instante en esos mitos planetarios. Desde ese momento, podrás transmitir las  orientaciones que sean  precisas.

Afrodita.- Pero, hablas de doce….¿ Cómo será posible un decatlón?.

Urania.- Eso es lo que tienes que descubrir (con intriga); recuerda : “Donde son diez, es el lugar de doce”…

Eósforo.- ¿ No nos vas a dar ya más ayuda?

Urania.- (Autoritaria)  La podréis invocar junto a la esencia de los cuatro elementos, sólo el influjo del Agua, el Aire, la Tierra, y el Fuego, volverá a materializarme…( Se retira  lentamente)…y no lo olvides,  Afrodita: “Donde son diez, es el lugar de doce”…”Donde son diez, es el lugar de doce”…
(Hay un gran resplandor, desaparece Urania)

(Telón)    
                   


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